La Cueva de las Manos es un lugar distinto, portador de un gran misterio, que aún permanece sin respuestas. Impresiones con más de 9 mil años de antigüedad, un imponente cañadón, un oasis prístino que desgarra la sequedad de la región y la presencia de una densa energía, son algunas de las atracciones de este rincón de la provincia de Santa Cruz. Un sitio cubierto con un halo de misticismo propio de audaces relatos de ciencia ficción.
La Cueva de las Manos y el misterio que esconden
Al ingresar a la Cueva de las Manos la primera sensación es de incertidumbre. Lleva un tiempo, a medida que se recorren todos los sectores con el guía, situarse en tiempo y espacio. Ponerse en la piel de un grupo de indígenas de hace 9 mil años no es cosa de todos los días. Ver la impresión de las manos que dejaron allí es algo único cuando finalmente se logra ese traslado temporal.
“Algunas teorías sostienen que las personas dejaron aquí sus impresiones para poder contactarse con sus antepasados y recibir información ancestral a través del contacto directo con las manos”, explica una de las guías que realiza el recorrido. No obstante, aún no se sabe con certeza por qué los indígenas plasmaron sus manos. Ni tampoco por qué eligieron ese lugar en particular de la Patagonia santacruceña.
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Más enigmas de la Cueva de las Manos
La Cueva de las Manos fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1999. “Es un hito y hay un vacío, porque las últimas pinturas se realizaron hace 1300 años, después desaparecen y no hay más registro de esta gente. Tampoco se sabe cuándo llegaron”, señaló Valeria Ucedo, arqueóloga santacruceña.
En relación a los motivos por los cuales los hacedores habrían elegido ese sitio, la guía especializada explicó que “una de las cosas que llama la atención es el buen estado de conservación de las pinturas. Si bien están expuestas al aire libre, a la humedad y a las inclemencias del clima, se mantuvieron muy bien con los años”.
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Contenido de las pinturas
Las pinturas que se pueden observar están en el exterior de la cueva. Las mismas relatan las vivencias de una cultura casi desconocida, con dibujos de guanacos, las manos en negativo (únicas de esta clase en América) y hasta figuras humanas de este grupo de cazadores-recolectores que bailan alrededor de una presa.
La cueva principal tiene 24 metros de largo, y en su interior también hay pinturas similares. “Lo que se ve más claro en el interior de la cueva son figuras de choiques que afuera no se ven”, explicó la guía.
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El recorrido de las cuevas es lineal y unidireccional, como el tiempo. Cada paso que se da, en las alturas del cañon, es como ir retrocediendo progresivamente dentro de una línea temporal imaginaria que discurre en el espacio. Lograr situar la mente a más de 9 mil años de antigüedad no es tarea fácil. Pero, sin duda, vale el esfuerzo para entender un poco más de dónde venimos.
Cómo llegar a la Cueva de las Manos
Para llegar a este lugar y conocer el misterio en torno a la Cueva de las Manos, las alternativas son varias. En vehículo se puede llegar por la Ruta Provincial 97, desde Bajo Caracoles, o por el acceso desde la Ruta Nacional 40.
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Para los amantes del trekking, otra opción es acceder desde el Portal Cañadón Pinturas del Parque Patagonia por el sendero “Bajada de Los Toldos”.
El inicio de este sendero propone unas vistas impresionantes del Cañadón y la Cueva. El sendero desciende por el Cañadón hasta el río Pinturas donde atraviesa un pequeño bosque de sauces, un oasis en medio del desértico paisaje, y el camino continúa hasta el Centro de Visitantes y lugar de acceso para la visita a la Cueva de las Manos.
Museo de la Cueva, en Perito Moreno
Perito Moreno es considerada la capital arqueológica de la provincia de Santa Cruz y es el punto de partida para un recorrido lleno de historia. El Museo de Arqueología Carlos Gradin rinde homenaje a este arqueólogo que ha estudiado en profundidad la historia de los antiguos cazadores-recolectores que poblaron la región y dejaron su impronta en los más de 80 aleros del Cañadón del Río Pinturas.
Es una excelente iniciativa que puede usarse como punto de partida para conocer en profundidad todos los detalles que envuelven a la Cueva de las Manos. Este sitio es ideal para recorrer antes de visitar la Cueva.