La Ruta del Vino de Chubut cuenta con características únicas. Con una superficie aproximada de 200 hectáreas cultivadas de diferentes variedades de uvas, esta provincia patagónica tiene la producción de vino más austral del mundo.
Los vinos más australes del mundo están en Chubut y esto la posiciona en el segmento turístico de las personas amantes del vino. Pero también jerarquiza la oferta turística, ante un mercado nacional e internacional.
Enoturismo
El enoturismo es un producto relativamente nuevo que se ofrece en distintas localidades. Para los productores y las bodegas chicas, constituye una actividad principal. Por un lado, puede llegar a ser el principal canal de ventas de los productos. Pero también es una actividad complementaria a un modelo de turismo rural, donde lo que prima es la puesta de valor del entorno y la experiencia de quienes visitan el lugar.
En la actualidad, en Argentina, hay aproximadamente 380 bodegas abiertas al turismo, instaladas en 17 provincias. Esto muestra un crecimiento de la actividad en los últimos tres años. En el 2020 únicamente se contaban 14 provincias y 200 bodegas dedicadas al enoturismo.
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Ruta del Vino: enoturismo en Chubut
En Chubut, empresas familiares bodegueras se abren a experimentar una veta turística dentro del rubro, para diversificar su oferta. Las distintas propuestas tiene como fin contar su historia, promocionar el producto y el destino que las alberga, y brindar un servicio de nivel.
Chubut cuenta actualmente con 24 establecimientos vitivinícolas: ocho elaboradores de vino artesanal, un elaborador de vino casero, siete fábricas de espumante y ocho bodegas. Esta actividad se complementa con el turismo en la categoría de Turismo Enológico. La propuesta ya une 3 regiones turísticas de la provincia: el Valle de Trevelin, la Comarca del Paralelo 42 y la Estepa Patagónica.
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Calidad
La Patagonia en general y Chubut en particular, son identificados como lugares sin contaminación, con baja polución y libres de plaguicidas. Debido a que las condiciones ambientales, en la mayoría de su superficie, no son favorables para la aparición de plagas o enfermedades. Esto les confiere a los productos de este origen la identificación como sustentables o incluso orgánicos por procedencia.
En Chubut, el estatus fitosanitario permite contar con productos “orgánicos”, “ecológicos” o “biológicos”, obtenidos a partir de un sistema agropecuario cuyo objetivo es el de producir alimentos sanos y abundantes, respetando el ambiente y preservando los recursos naturales.
Los vinos de calidad buscan reflejar el micro territorio de donde provienen las uvas y si este es un ambiente natural, la expresión del vino será auténtica. Y a largo plazo, los viñedos manejados de forma orgánica sin incorporación de productos de síntesis son más longevos, durando muchos más años productivos y manifestando más el territorio donde está implantado mientras más años tenga el viñedo.
Las condiciones agroecológicas de Chubut, caracterizada por la combinación climática, de suelo y relieve, resultan favorables para el desarrollo de las vides produciendo variedades de cepas como Pinot Noir, Sauvignon Blanc, Chardonay, Cabernet Franc y Malbec.
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El potencial de la región es enorme y dar a conocerlo no sólo permitirá instalar a la Chubut en el mapa mundial de vinos, sino también impulsar a nuevos productores a sumarse a este desafío en una región con características muy distintivas.
Ruta del Vino en Chubut: los viñedos más australes del mundo
En la provincia, la actividad vitivinícola ha venido creciendo en los últimos años, contando en la actualidad con 84 productores activos, en distintos estadios de producción, establecidos a lo largo del territorio. Cabe señalar que últimamente muchos de estos establecimientos han ido incorporando la oferta del enoturismo como estrategia de marketing y promoción de sus productos.
En Chubut se encuentra el viñedo más austral del mundo cerca de los 45 grados latitud sur, en la localidad de Sarmiento. La superficie destinada al cultivo de la vid es de 139 hectáreas, donde se producen cepajes de ciclo corto y espumantes, destacándose las variedades Pinot Noir, Chardonnay, Gewurztraminer, Sauvignon Blanc, Merlot, Pintor Gris, entre otras.