Piedra gigante en los alrededores de Tres Lagos

Tres Lagos, un destino turístico emergente sobre la Ruta 40

Tres Lagos es una pequeña localidad santacruceña que guarda muchos tesoros por descubrir. Dueña de un enorme patrimonio natural y cultural, este sitio ofrece alternativas únicas en la región.

Recorriendo el lugar, se pueden visitar petroglifos, pinturas rupestres, museos, increíbles formaciones rocosas y, además, experimentar la magia de un pueblo rural que late al ritmo de su milenaria historia.

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Tres Lagos, un lugar distinto con impronta patagónica

Tres Lagos es un pueblo perdido en la inmensidad de la estepa patagónica. Se trata de esos lugares que mantienen la esencia más pura de la región. Guarda una cantidad de atractivos turísticos naturales que lo convertirán, progresivamente, en sitio de referencia para todo tipo de turistas.

Pinturas rupestres en cuevas ubicadas en cercanías a Tres Lagos

Esta pequeña localidad es un diamante en bruto que el esfuerzo de su gente está puliendo para que se posicione como un lugar elegido y brille gracias a todo su potencial turístico. En Tres Lagos los visitantes podrán ver, entre otras cosas, enigmáticos petroglifos, pinturas rupestres de 9 mil años de antigüedad, museos y extraordinarias formaciones rocosas.

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Un pueblo con un enorme potencial turístico

Tres lagos es un pueblo rural, un destino denominado emergente, que busca constituirse como un pequeño centro de servicios turísticos.

Comercio ubicado sobre la calle principal de Tres Lagos

Historia de Tres Lagos

El origen de Tres Lagos como poblado se remonta a los primeros años del siglo XX. En ese entonces, los carros cargados de lana de las inmensas estancias existentes en la zona de lago Argentino, lago Viedma y lago San Martín, sobre la Cordillera de los Andes, se trasladaban a Comandante Luis Piedrabuena (en la Ruta Nacional 3, poco antes de Puerto Santa Cruz) y regresaban cargados de víveres.

Alero de piedra que fue utilizado como cueva por los pueblos originarios.

Las enormes distancias sumadas a la inexistencia de caminos y puentes, hacían que esa travesía llevara casi un mes de viaje. La necesidad de prestar facilidades de alojamiento y proveer de provisiones los viajeros y forraje para los animales de tiro, hizo que comenzara a formarse pequeños caseríos.

En 1925 D. Fausto Vallina se estableció con una herrería. Así dio origen al pueblo que, en principio, se denominó Piedra Clavada, por su proximidad con el monumento natural así denominado.

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En 1937 recibió el reconocimiento institucional como pueblo, junto con la nueva denominación: Tres Lagos, relacionada con el cruce de caminos que llevan a los lagos Argentino, Viedma y San Martín; creándose también la primera escuela, el Juzgado de Paz y una dependencia de la entonces policía territorial. Ya existía, también, una pulpería, de la familia Alquinta. Fue fundado oficialmente como localidad el 3 de agosto de 1973, por ley provincial.

Cómo llegar a Tres Lagos

Este pequeño pueblo está ubicado sobre la Ruta 40, a unos 160 kilómetros de El Calafate en dirección norte, y a 120 kilómetros de El Chaltén.

Un lugar perdido que busca ser encontrado

Tres Lagos es un pueblo empotrado en medio de la estepa santacruceña. Un lugar cubierto con un halo de misticismo, que guarda en lo más profundo de sus entrañas la esencia más pura de la Patagonia.

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